lunes, 23 de septiembre de 2019

A XELAJÚ.

Hoy Xelajú de mis recuerdos
quiero cantarle a tus secretos
como dulce dormida niña
al pie de tu volcán Santa María;
pedacito de tierra, pedacito de risol
el que un día conquistara
el intrépido español.

Puso su espada de plata fementida
en el pecho de su defensor Tecún Umán,
sin saber que su sangre de ardiente valentía
se trocara en leyenda hacia su historia inmortal.

Es tu otro descendiente
el hermoso Río Xequijel
que hoy todavía arrogante y pensativo
viene conservando el recuerdo, también de
Azumanché.

Y los Llanos de Urbina
testigos de tu historia fiel;
los que hoy, vida te dan tanto
sin lágrimas ni llanto arrepentido.

Los Llanos del Pinal
con sus recuerdos de conquista,
viven esculpidos tus honores;
orlados entre rosas tan sutiles
como gotas de límpido historial.

Recibe Xelajú grande y soberano
estas líneas que escribí;
enlazadas con tu cielo azul jamás vencido
porque veo que continua siempre igual.

domingo, 22 de septiembre de 2019

AL ALMANAQUE ESCUELA PARA TODOS EN SUS 25 AÑOS DE EXISTENCIA

Mensajero de virtudes espirituales que al alma llegan
bendiciendo los senderos que la vida te regala,
has viajado desde las galaxias más lejanas
unificando en haz de luz y de poesía
el cielo y la tierra que te abrigan.

Eres bendito porque en las entrañas de tu gran filosofía
perfumas el intelecto con tus conocimientos tan sagrados,
perlas que te a través de los luceros compaginas y enhebras
el don de la vida y la sencillez del que te ama y te venera.

Tus años de existencia transcurridos
en el lapso del tiempo pasajero
son estandarte que el viento besa con ósculos de gloria;
suspiros eternos de Roderich Thun, quien con maestría innata
te lanzara al mundo
como Dios enviara una inverosímil bendición.

Nadie como tu, que eres esencia del lenguaje más sencillo
conoce el motivo de la existencia del ser humano que vigila
por medio de tus páginas el devenir, el presente y el futuro,
orificando la guirnalda que esculpes poco a poco en el granito;
aquel que al absorber la luz del sol por la mañana
brilla contigo con la luna allá en la noche.

Te has perdido en la sombra del río, del cañaveral y la montaña
para conquistar del esmeraldino valle, la mansión o el rancho
más lejano,
para dejarte acariciar como gorrión de colores fatigado
entre las manos del hombre ante la hoguera con tizones confortado.

Llevas en ti, la esperanza del arrullo de la Historia que reclama:
Que sus hijos practiquen tu ejemplo bendecido y añorado;
por eso tú, no tienes nada que exigir al mundo que te lee
y comprende que tus "veinticinco años de laureles" son amores.

Recibe mi sencilla exaltación que a tu nombre escribo,
porque no cuento con tesoros como los tuyos conquistados,
es para elogiarte cual divino Testamento
para el humilde, el docto y del mismo Dios que en ti se irradia.

Continua tu trajinar interminable por tu sendero elegido
y cuando llegues al pensamiento de aquellos que aún te desconocen,
ruego que en tus momentos de oración al Creador Inmaculado
te acuerdes mi como hijo tuyo en tus entrañas, bautizado.

AUTOR: RODIMIRO GRAMAJO RODRÍGUEZ. EN 1994.

MADRE.

Antena que a Dios me comunica,
diástole y sístole de mi corazón tan pecador;
ambigüedad que así me compromete
a entregarte lo que aun queda de mi ser.

Aprisionas mis ondas cerebrales
que se desprenden buscando lo inefable
como tus entrañas que conozco desde ayer
y te gritan desde mi conjunción molecular.

Lo demás lo he dedicado al desvarío
que ha fertilizado la neblina que te peinas
y hace arrepentirme de mi inédito pasado
para servirte de báculo y calor.

Dadme siquiera esta oportunidad que necesito
para continuar el viaje que me falta
y así, cuando me enfrente a tu Creador
me conceda la indulgencia que otros
han perdido como yo.

A TI MAESTRO.

Te haces llamar creador y luminaria
en la senda del educando que te llama,
pero tú, entre sonrisas y loores
exiges extravagante lista de útiles y más.

Allá donde laboré también como maestro
la vida precaria me rodeaba,
sin embargo se cumplía la tarea
con un lápiz, un cuaderno
y con fe en el corazón.

Ilumina tu camino como Cristo Nazareno,
con paciencia y sin fórceps hacia el padre,
que no hace más que alterar su presupuesto
para cumplir con tus caras exigencias.

Bendito tú, que te atreves con orgullo
a fomentar la inflación que nos agobia,
pero si con ello te sientes feliz
en tu santo apostolado
la vida premiará con lauros y espinas tu osadía.

Y aquellos que en la inscripción del educando
formulan cor tapizas para crear categoría,
habrá un mañana en que aquel que fuera marginado
escribirá en sus nombres: Hiel, suspiros y reproches.

Continua tu peregrinar educativo y exigente
¡Oh, creador y luminaria de mi patria!
y que  al final de tu jornada
saborees el agridulce de tu ansia inflacionaria
como laurel a tu conciencia y despotismo exagerado.

ESBOZO A MI HERMANO JOSÉ NERY GRAMAJO SÁNTOS.

Hoy me toca dirigirme a ti en este boceto
para hacerte llegar lo que yo siento;
tanto tiempo que estuvimos distanciados
y hoy rehacemos el encuentro tan deseado.

Oportunidad que bendigo a cada instante
porque puedo saborear tu esencia e intelecto;
pero no puedes prohibirme el derecho
de expresarte que tus genes son sagrados.

Eres el arquitecto de las vidas que te inflaman
y hacen que tus poros promulguen un soneto
que al ligarlo con tu verba a veces tan inédita
no hace más que hacernos meditar.

Cuando hablas y predicas el ejemplo
parece que la diafanidad ya no existiera;
no sé, si tus palabras la hurtan de inmediato
o surge otra sin intervalo y de métrica sencilla.

Quisiéramos escapar de tu atracción o magnetismo,
pero tu virtud es tan peculiar;
casi, se cumple tu prédica Cristiana,
ejemplo: Jonás que no pudo esconderse del Creador.

No es que a mi poemario le falten delineados
y por eso escribo tan sencillo esta y otra vez;
tu vestuario es la decencia, tu lo sabes,
entonces creo que mi alma te sigue a donde vas.

Cada vez que estoy saboreando aquel silencio
puedo comunicarme más con Dios;
a la vez puedo comunicarle tus secretos
y encomendarme a él con tu aliento y con tu voz.


Supiste soportar la tempestad que te azotaba
en tu barca quebradiza, cual símil de Jesús,
te amamantó la fe que traías tan innata:
No como la de Pedro, el apóstol,
cuando mientras dormía mi Maestro.

Soy tu misión que conllevas cada día,
es tu encomendado que tienes que cumplir;
que diera porque algunos hombres de mi orbe
imitarán tu ejemplo por el pecado terrenal.

Igual como en la Sodoma pecadora,
haya uno por el cual merezcamos el perdón;
¿ será por ti este milagro anhelado?
¿o por otro que ya sin quererlo te imitó?

No creas que soy exhorbitante o algo parecido
en compararte con lo eterno que amo tanto,
pero tengo de testigo : Tu conciencia que reclama
a mi corazón que palpita como el tuyo.

Y si duda tienes de mi esbozo
continuemos caminando de la mano
y escribiré el libro o los Salmos que te aclaman
como David tañendo el arpa que aun suspira y te bendice.

Continúa con tu báculo, caminando y dialogando
hasta libertar de nuevo lo que de Israel quedó
y aunque las arenas calientes del desierto
quemen tus plantas o las calcinen a la vez
llegarás más allá, a donde tu Antecesor llegó.

Y si continuas acordándote de mi nombre como
hermano,
tal vez en mi mente, inspiración quedara,
volveré de nuevo dirigirme a tu inocencia
para sentirme grato en este mundo que te adora.

Pero tengo fe entre tus retoños o herederos,
que como nuevos patriarcas pulirán tu obra bien amada;
quienes no olvidando el regazo de su madre
me llevarán también a tu tierra consentida.

Saborearás en tu sueño eterno en aquel día
la revelación creadora que hoy amamos;
la miel como encanto llegará a tus labios
tal vez a humedecer;
pero el maná que nos has legado poco a poco
cada día, nuestra hambre de Dios mitigará.

No titubees en tus designios tan sagrados,
los cuales, el Creador te encomendara:
camina plácido por la senda que escogiste,
que también lo hizo Jesucristo soportando aquel madero
para luego eternamente florecer.

FRAGMENTO QUETZALTECO.

Como suenan las campanas
de mi gótica iglesia San Nicolás;
son eléctricas, son bellas
y famosas en toda la América Central.

En el altar del Sagrado Corazón de
Jesús Sacramentado,
medita el Redentor y dirige su vista piadosa
hacia adelante,
para que el Parquecito Benito Juarez
permanezca higiénico y romántico como su fuente
donde antes habían pecesitos de colores.

Aquí está el kiosko de aspecto tan capcioso
donde está escrito el poema  "Al jardinero"
más a un lado está erguido el Calendario Azteca
donde se refleja el sol en la mañana
pero da refugio a ebrios y drogados.

Vuelvo al tañir de las campanas
que conserva la iglesia mencionada,
pero al lado sur,
donde todavía se ven pocos Truenos tal vez
envejecidos,
se sienten olores nauseabundos
que no se pueden soportar.

Salieron a esa calle, ventas nobles
para  lograr la subsistencia en ésta vida
tan precaria;
aquella que la familia añora cada día
para poder cumplir su cometido aquí en la tierra.

Son los "Compadres" de colores bien vestidos,
desparramando olores de bocados bien apetitosos;
solo espero que los noctámbulos respeten,
para no seguir manchando esa callecita
con excremento y meados que contagian.

Especialmente a los educandos
que transitan esbeltos y gallardos
hacia el bello "Liceo Guatemala"
y otros, cual Domingo Sabio bendecido
hacia el eterno carisma pedagógico
del Colegio San Juan Bosco tan querido.