viernes, 12 de diciembre de 2008

Reflexiones en Navidad y Año Nuevo

Porque pensar en algarabías en año nuevo, si mucho tenemos que orar

Bendito el que tuvo en navidad una oración en sus labios pobre él que de ella se aparto

Que tu mejor tarjeta de navidad haya sido tu sonrisa benefactora.

Para escribir pensamientos se necesita suficiente filosofía o un sensible corazón navideño.

Si no podemos cambiar en navidad o año nuevo, siquiera hagamos el intento.

Que la mejor iridiscencia del árbol navideño sea el supremo respeto al hermano y al desvalido.

Que el año nuevo sea oportunidad de renovar nuestros votos de confianza y no sólo para entregar un valioso presente.

Que el año nuevo no sea el disfraz de la hipocresía.

Que la navidad y el año nuevo sean el confesionario que nos limpie y nos humanice.

Que este año nuevo sea el primer paso hacia el cambio total.

Que este año nuevo no sea competencia en algún regalo, sino en alcanzar la verdadera sinceridad.

Quien no entiende el llamado que nos hace esta festividad espiritual tiene enfermo el corazón.

En esta navidad, mi corazón te pidió posada, espero que siempre continúe en tí.

Que mi ser sea el farol que siempre te de luz, así merezca yo la tuya.

Que la navidad sea la magia para cambiar nuestros defectos

Que la navidad nos enseñe a perdonar para ser perdonados

Que la navidad sea cada día para que nunca fenézcala reflexión.

Que la etiqueta de cada obsequio lleve la esencia de la humildad.

No interesa el regalo, sino la intención que conlleva.

Cada alma tiene una luz, apreciémosla desde esta navidad.

Al recordar el nacimiento de Jesús, podamos renacer en el pesebre del amor.

No esperemos la navidad para amar, amemos siempre,

Que en nuestra oración navideña, vaya el recuerdo hacia el niño de la calle, la viuda y el inválido.

Si no podemos obsequiar una uva en esta navidad, demos una sonrisa.

Que nuestras manos en esta navidad estén siempre abiertas para dar, luego para recibir.

Apreciemos la navidad en el sueño y sonrisa del niño, no en la vanidad.

Adornemos nuestro hogar con el aroma del pinabete, pero principalmente con la bondad.

Que esta navidad llene tu mente, corazón y alma de sabiduría y caridad para vivir lleno de felicidad.

En esta navidad solo haya espacio para la reflexión.

Que en los deseos de cada navidad resplandezca el respeto mutuo.

Busquemos la forma de encontrar la justicia en nuestros comportamientos navideños.

Que tu abrazo navideño vaya saturado de integridad.

Año nuevo: Voz que nos llama a la reflexión para cambiar.

Quien no piensa en navidad y año nuevo, está arando en tierra infértil.

Quien confunde el año nuevo con libertinaje, más le vale no haber nacido.

Año nuevo; un reto para darle al mundo lo mejor.

El mayor deseo de Dios es renacer en cada año nuevo para alcanzar su perdón.

Que el año nuevo sea un autoanálisis hacia nuestra conciencia.

Que el año nuevo se refleje en nuestras nuevas actitudes.

Que la navidad y el año nuevo sean nuevos juramentos para erradicar la maldad.

Que el año nuevo sea el colirio que limpie nuestra visión hacia la luz y la cristianización.

Riega tu serenidad en esta navidad para que perdure toda tu vida.

Cuando el reloj marque las doce de la noche en esta navidad y año nuevo, recuerda que tu puntualidad te llevará al triunfo material y espiritual.

En cada paso que des en esta navidad esté presente la prudencia.

Abona tu fe esta navidad y tu espíritu se purificará más y más.

Que esta navidad sea el nacimiento de tu hábito de cooperación.

La compasión, no es sentir lástima en esta navidad, es una invitación para ayudar y compartir.

En esta navidad, descubre la confianza en tí y predícala entre quienes la extraviaron.

Año nuevo: Voz que nos llama a la reflexión para cambiar.

Esforcémonos en esta navidad por deleitarnos en la tolerancia y hermandad

Que tu honestidad, sea tu estrella en esta navidad.
Busquemos y multipliquemos la paz desde esta navidad.

Pensemos en el significado de la navidad y encontraremos la verdadera esperanza que anhelamos.

Jesucristo es el sublime prototipo de equidad, imitémoslo.

La lealtad es otro sinónimo de navidad.

Si practicamos el servicio hacia nuestros semejantes, llegaremos a conocer la beatificación navideña

Que esta navidad te enseñe agradecer, lo que la vida te obsequia cada día.

Evaluemos en esta navidad nuestro grado de honradez, para evaluar a los demás,
Habla con la verdad para que se ilumine más tu navidad.

Cómprate lo poco que tienes en esta navidad y gozarás de dicha en tus días venideros.

Sé responsable contigo mismo en esta navidad y serás ejemplo eterno.

Irradia tu optimismo para darle más luminosidad a esta navidad.

Que tu perseverancia sea hermana de esta navidad, para hermanarte con la sublimidad.

El autocontrol no es más que respetar a los demás en esta navidad.

Que el entremés navideño sea la comprensión definida y grata.

Que la solidaridad que naciera cerca del pesebre, se fortalezca en esta navidad.

Tu árbol navideño está lleno de luces :e as tú debes estarlo con destellos de profunda disciplina.

Trata de bañar en alegría a tus semejantes en esta navidad.

Que tu valentía en esta navidad sirva de apoyo para el necesitado.

Que en esta navidad no se convierta la libertad en libertinaje, sino, en gozo hacia el Señor.

Una medidita de generosidad basta para cumplir con la receta navideña.

Ten paciencia en todo y rimarás con esta navidad.

Que tu mesa navideña se cubra con viandas repletas de amistad.

Dicen que el trabajo honra a la persona la navidad dulcifica.